lunes, 28 de marzo de 2016

Jean GABIN (1904 - 1976)


     ACTOR francés. Rudo, tosco. Interpretó al antihéroe que lucha por causas sencillas. Se decía de él que no actuaba, que existía. Aunque, salvo para los amantes del clásico, su memoria irá desapareciendo.
     Nacido en París, hijo de actores de café-concierto, desempeña variados oficios antes de empezar como extra en el Follies Bergère (1922). Llega a actuar incluso en una opereta trabajando con Mistinguett, quien le consigue un contrato en el Moulin Rouge (1928).
     La llegada del sonoro le vale para ser contratado como actor-cantante, formando pareja con Brigitte Helm y Josephine Baker (1931 y 1934). Su carrera da un giro al ser dirigido por los mejores realizadores de la época: Duvivier le dirige en "María Candelaria" (1934), "Gólgota" (1935), "La bandera" (1935), o "Pepe-le-Moko" (1936). Jean Renoir en "Los bajos fondos" (1936) y "La gran ilusión" (1937), y Marcel Carné en "El muelle de las brumas" (1938) y "Amanece" (1939). Gabin se convierte en el actor más popular de Francia, sólo rivalizando con Charles Boyer.


    Al estallar la 2ª G.M..se marcha a EE.UU., donde rueda una película sin interés, pero conoce al que será el gran amor de su vida, Marlene Dietrich.
     De regreso a Francia (1946), más macizo y con el pelo cano, le cuesta mantener su imagen de galán. Implantará entonces un nuevo tipo, el de veterano tranquilo y de vuelta de todo. Interpreta a policías, hampones o terratenientes: "El aire de París" (Carné-1954), "La travesía de París" (Autant-Lara-1956), "El comisario Maigret" (Delannoy-1957), "Los miserables" (Le Chanois-1957), donde compone a un perfecto Jean Valjean, "El presidente" (Verneuil-1960) y "Gran jugada en la Costa Azul" (ídem-1962).
     En el país galo aparecían una nueva generación de actores: Alain Delon, Jean Paul Belmondo, pero Jean siguió trabajando hasta prácticamente su muerte, retirándose entre filme y filme en su granja de Normandía. Al morir, se había convertido en un mito. Estuvo casado con la actriz Gaby Basset (1925-33)

viernes, 25 de marzo de 2016

PERVERSIDAD (1946), de Fritz Lang.


  
   Fritz Lang es uno de mis directores preferidos, y me gusta repasar cada 4 o 5 años sus películas.
     Ayer me puse "Scarlet Street", el título original de esta cinta, rodada entre "La mujer del cuadro" (1944) y "Secreto tras la puerta" (1948), los tres filmes que produjo y dirigió para la compañía Diana Productions, fundada por él, y el matrimonio formado por el productor Walter Wanger y la actriz Joan Bennett.

   
  La historia es sabida. La caída de un hombre maduro, insignificante, casado con una viuda por conveniencia o rutina, y que llega a robar para satisfacer los caprichos de una buscona (Edward G. Robinson, correcto como siempre, y Joan Bennett, magnífica como prostituta con un punto de perversidad, cinismo, y vagancia. Pero el mejor es Dan Duryea, sobresaliente en su papel de chulo, jugador y borracho. Destacar que también sale Margaret Lindsay, desaprovechada en un breve papel.

  
   Con guión de Dudley Nichols y fotografía de Milton Krasner, dos valores seguros, Lang la dirigió con su estilo habitual, sin concesiones. 
     Un Lang que luchó siempre contra el sistema de estudio hollywoodiense. No le dejaban colaborar en los guiones, aunque de alguna forma interviniera en ellos, y nunca le dejaron responsabilizarse del mon taje final de sus filmes. Claro que su veteranía y experiencia le permitió emplear algunos "trucos": por ejemplo, llegar el primero a los rodajes, y ajustar la iluminación a su gusto, o enfocar las cámaras.
     Pese al éxito de su etapa en U.S.A., y "Perversidad" no es una excepción, se le tachó siempre de que rodaba filmes a contracorriente, por lo que en 1956, decidió aceptar una oferta y regresar a Alemania.

martes, 15 de marzo de 2016

ESTACION TERMINI (1952), de Vittorio De Sica

   
  Acabo de ver por tercera o cuarta vez "Estación Termini", un "capricho" de David O´Selznick, deseoso de que su amada Jennifer Jones hiciera una película neorrealista.
     Y el filme "parido" no es otro que el que comento, que se ve con agrado, aunque a muchas leguas de "Breve encuentro", la magnífica cinta de David Lean, que muchos quisieron comparar en su momento.
     Todo sucede en una estación, llevando el peso de la película, la Jones y Montgomery Clift, actor que tenía una peculiar técnica interpretativa, que lo decía todo con su rostro, con su mirada, una mirada que le podía permitir aparecer en la pantalla sin molestarse en actuar.
     Como sobrino de Jennifer Jones, actuaba, muy joven, Richard Beymer, que 9 años después se haría famoso interpretando "West-Side-Story".

  
   Los tres, la Jones, Clift, y Beymer, eran norteamericanos, y la película, coproducida por Selznick, Ponti y DiLaurentiis, se rodó en Italia, y la pregunta que nos hacemos es: ¿sabían italiano? ¿sabía De Sica inglés? ¿habían en el rodaje intérpretes? Algo de ello hubo, porque al correcto guión de Cesare Zavattini, tuvo que ponerle diálogos Truman Capote, y a la fotografía de G.R.Aldo, se le compensó la de Oswald Morris, lo que hace suponer que, el rodaje, transcurrió como si dos historias, o dos películas diferentes fueran.
     Y repito que, la película me gusta, que hay numerosos secundarios (Gino Cervi como el comisario), o mejor dicho, extras (Paolo Stoppa, Nando Bruno, Memo Carotenutto) que su pequeña aportación lo hacen muy bien, pero, la impresión es que "algo chirría"

domingo, 13 de marzo de 2016

GLENN FORD (1916 - 2006)

    
 ACTOR norteamericano de origen canadiense. Sobrio, natural, mirada astuta. Interpretó a héroes duros y amargados, moviéndose con igual acierto en el cine noir o el western. Cabe destacar que, en el apartado del far west, era el actor que desenfundaba más rápido.
     Nacido en Quebec, su familia emigra a EE.UU cuando él tenía 7 años. Tras sus estudios se interesa por la interpretación, actuando en grupos aficionados hasta trabajar en Broadway en 1938.
     Al año siguiente debuta en el cine, y algo deben ver los productores de la Columbia, que le ofrecen un contrato de larga duración (1940-58), interrumpido durante la 2ª G.M.

  
   Después de la contienda, su primer filme es "Gilda" (1946), un exitazo. Amparado por el gancho de Rita Hayworth y la célebre bofetada, Ford se convierte en estrella. De hecho, ya había trabajado antes con Rita, en "The lady in question" (1940), una nueva versión de la película francesa "Natalie", dirigida por Marc Allègret.
     Aparte de los filmes que rodó con Rita, "Los amores de Carmen" (1948) o "La dama de Trinidad" (1952), triunfó con "Los sobornados" (Lang-1953), "Deseos humanos" (Lang-1954), "Semilla de maldad" (Brooks-1955), "Jubal" (Daves-1956) o "El tren de las 3´10" (Daves-1957).

   
  En 1958, terminado su contrato, ficha por la MGM, donde alternará westerns con comedias durante los diez años que estuvo en el estudio del león rugiente. "Cimarrón" (A.Mann-1960), "Un gangster para un milagro" (Capra-1961), Los 4 jinetes del Apocalipsis" (Minelli-1961), "Chantaje contra una mujer" (Edwards-1962), "El noviazgo del padre de Eddie" (Minelli-1962).
     Sus últimos trabajos en el estudio no tuvieron la aceptación de siempre, probando de seguir trabajando en la TV, donde tuvo cierto éxito la serie "Sam Cade" (1970-75). Su regreso al cine en 1976, con 60 años, le sirve sólo para trabajos casi de estrella invitada, como su papel de padre de Supermán. Algún papel infumable en cintas de terror, se retiró en 1991.
     No fue una superestrella, pero algunos de los buenos directores supieron sacar lo mejor de él (Lang, Minelli, Ch.Vidor, Daves, o George Marshall. No era un actor conflictivo, y esto le valió mucho. Durante bastantes años estuvo casado con la actriz Eleanor Powell.

martes, 8 de marzo de 2016

EL PUENTE SOBRE EL RIO KWAI (1957), de David LEAN


    La gestación del filme se debe al productor Alexander Korda, deseoso de tener un éxito con la novela de Pierre Boulle. Compró los derechos y encargó a Carl Foreman, un guionista exiliado a Inglaterra a causa del C.A.A.
     Foreman escribió el guión, pero Korda se asustó de su antimilitarismo, y no vió bien que el ejército británico quedara tan malparado. Se despreocupó del asunto, y cuando Sam Spiegel, un atípico productor, aventurero y sin escrúpulos, que acababa de obtener su primer éxito con "La ley del silencio", se interesó por el, le vendió los derechos.
     Respetando lo escrito por Foreman, contactó con David Lean, que le pareció una buena historia, aunque quería colaborar en reescribirlo.
     Desde el primer momento, Lean y Foreman no se entendieron, y pese a que Spiegel lo controlaba todo, lo despidió, encargando un nuevo guión a Michael Wilson, que fue del agrado del director.
     Lean convenció al productor de rodar en Ceilán, también logró que el filme tuviera la famosa "marcha del coronel Bogey" (un acierto), retocó el guión de Wilson para que el papel del coronel Saito tuviera más envergadura, y acabó imponiendo a Alec Guinness para que diera vida a Nicholson.
     A cambio cedió en que el rol de Shears fuera interpretado por un americano, y que por imposiciones del estudio (la Columbia), se creara un nuevo papel, el de la enfermera. Así habría un toque de romance dentro de un filme totalmente bélico.

     El rodaje se hizo largo para todos, duró 8 meses, en medio de una selva, con temperaturas altísimas y mucha humedad, pero Lean lo manejó con autoridad y experiencia. Guinness y Hayakawa (Saito) estaban sublimes, pero también quedó contento del trabajo de William Holden (Shears) y Jack Hawkins (mayor Warden).
     Gran filme, que todo el mundo ha visto diversas veces. Sólo voy a comentar tres escenas. el coronel Saito llorando cuando comprende que ha debido ceder ante Nicholson, las confidencias de ambos, una vez acabado el puente. Nicholson le confiesa: "En 28 años de servicio, sólo habré pasado unos 10 meses en casa", y al final, tras el derrumbe del puente, en la corriente del río, se ve el cartel anunciando el final de la obra realizada por prisioneros británicos. Por encima de todo, repito, quedan los duelos interpretativos de Guinness y Hayakawa. 
     Y una anécdota. En la novela de Boulle, el puente no es explosionado.

domingo, 6 de marzo de 2016

MARIA VALVERDE, OLVIDADA EN ESPAÑA


    Hace tiempo que lo pienso, que lo digo, y estoy seguro de ello. !Va a ser difícil ser fan de María en España! Y a María, por ir siempre por libre, le será difícil ser reconocida en España.
     Si exceptuamos Fotogramas y alguna revista extranjera con versión española, las de aquí, sean especialistas en cine o del corazón, la ignoran. !Miren si no, cuántas veces ha salido en el último año! Son datos que no fallan.
     Esperemos que el estreno de "Gernika", muy próximo, de motivos para que se hable de ella, espero que para bien. Pero se va a celebrar en breve (del 15 al 30 de marzo) en Nantes (Francia), un festival dedicado al cine español. Se verán películas de todos los tiempos, de 1939 (la más antigua) a 2015. Cuarenta y dos filmes en total, la mayoría rodados en los últimos 15 años. No hay ninguno de María.
     ¿Quien ha hecho la selección? Me lo imagino: los que para trabajar, necesitan de subvenciones. Los que mueven el cotarro del cine español. Los que se manifiestan, los que vienen a llorar a las televisiones sus quejas. Así, en este festival, se verán películas de Zambarno, Arrabal, Amenábar, Almodovar, León de Aranoa.
     Por cierto que, abarcando un período tan amplio, también encuentro a faltar películas de Gil, Forqué, o Neville, por no citar a más.Todos grandes directores.
     Y en cuanto a María, menos mal que en Inglaterra, Francia (va a rodar 2 cintas allí), y sobretodo, Latinoamérica, no se la olvida, y le reconocen sus méritos. !menos mal!