Nacida en Quincy (Illinois), un concurso de belleza le permite ser contratada por la Metro, y debutar con apenas 14 años. Se fija en ella John Barrymore, que la hace su pareja en "El árbitro de la moda" (Beaumont-1924), y más tarde en "Don Juan" (Crosland-1926).
Sin ser una gran belleza, tenía un rostro armonioso, y aunque nunca se convirtió en estrella, estuvo más de 45 años en el candelero. Con experiencia radiofónica, es contratada por la Warner, donde alternará papeles de ingénua con los de esposa pérfida e intrigante. Un papel ingrato en "Tierra de pasión" (Fleming-1932), el mismo que interpretaría veinte años después Grace Kelly, lo compagina con uno simpático en "Desengaño" (Wyler-1936), rematándolo, pese a que ya era demasiado mayor, con la intrigante Brigid O´Shaughnessy de "El halcón maltés" (Huston-1941).
Ese sería su mejor año, recibiría el oscar secundario por "La gran mentira" (de Edmund Goulding), donde no desmerecía de la gran Bette Davis.
Prefiriendo los buenos papeles a los primeros papeles, logró alargar su carrera hasta 1965. Incluso superó el escándalo de su divorcio en 1934, donde, durante el juicio, aparecieron las cartas que había escrito a sus amantes. Cuando se retiró, escribió sus memorias, y después algunas novelas.
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