Katharine HEPBURN (1907 - 2003)

 
   ACTRIZ norteamericana. De belleza élfica, rostro angulado, pecosa, rebelde, impetuosa y testaruda, se mantuvo, con grandes éxitos (4 oscars) y sonoros fracasos más de 60 años en el cine, admirada y querida por todos.
     Nacida en Hartford, hija de una sufragista, desde los 3 años aparece en festivales feministas organizados por su madre. Decide ser actriz, empezando en el teatro (1928-31), pero cosecha innumerables fracasos, las más de las veces debido a su intransigencia. Pero allí traba amistad con un gran director de actrices, George Cukor, quien la anima a debutar en el cine, nada menos que al lado de John Barrymore en "Doble sacrificio" (1932). Triunfa plenamente y la RKO le ofrece un contrato de 7 años.
     Ya en su tercer filme, "Gloria de un día" (L.Sherman-1933), consigue su primera estatuilla, y el mismo años está genial como Jo en "Las 4 hermanitas" (de Cukor), pero "La gran aventura de Sylvia" (1936) es un fracaso a pesar de Cukor. El público no entendió que se pasara casi toda la película disfrazada de chico. Tampoco la ayudó "María Estuardo" (1936), uno de los peores trabajos de Ford. En Hollywood empiezan a decir que Katharine es veneno para la taquilla.
     Se recupera con dos grandes trabajos al lado de Cary Grant, que será su pareja en esta época, "La fiera de mi niña" (Hawks-1938) y "Vicir para gozar" (Cukor-ídem). No obstante, la marcha del director a la MGM, hace que no renueve el contrato y le siga al estudio del león rugiente, donde triunfa en su primer trabajo "Historias de Filadelfia" (1940).

    Está dos años dedicada a los escenarios, y en 1942 el estudio la empareja a Spencer Tracy en "La mujer del año" (Stevens-1942). Será la primera de las nueve películas que hicieron juntos. Todas de éxito. Y pese a que, en un principio no conectaban, el respeto que ambos tenían por el trabajo del otro, les llevó a convertirse en pareja en la vida real. Una pareja platónica, ya que Katharine era homosexual, y Spencer, católico convencido, nunca quiso divorciarse ni abandonar el hogar.
     Eso sí, dejaron a la historia del cine, alguna de las mejores comedias, como "La costilla de Adán" (de nuevo Cukor-1949), y Katharine cosecharía 3 premios más con ""¿Adivina quien viene esta noche?" (Kramer-1967), "El león en invierno" (1969) y "En el estanque dorado" (1981), donde ya se hacía visible el mal de Parkinsson que aquejaba a la estrella.
     Aún trabajó 13 años más, retirándose en 1994, cuando contaba 87 años de edad. Su muerte, rebasados los 95 años, dejó huérfanos a todos los amantes del cine, de aquel cine clásico. Todos queríamos a Katharine.