jueves, 6 de octubre de 2016

Leslie HOWARD (1893-1943)


    ACTOR británico. Rubio, pelo rizado, gafas de miope, aspecto de intelectual despistado, con una pipa en la mano. Es el inolvidable intérprete de Ashley Wilkes en "Lo que el viento se llevó"
     Nacido en Londres, es empleado de banca hasta ser llamado a filas en la 1ª G.M. (1914). Al final del conflicto decide ser actor, y en poco tiempo triunfa en los escenarios de Londres, y poco después en Broadway. Al mismo tiempo, aparece en alguna película muda.
     Pero no es hasta que, durante una gira por EE.UU., le convencen para trabajar en la gran pantalla. Ya era la época del sonoro (1930), y Leslie consigue un contrato en la M.G.M., que dejará muy pronto para irse a la Warner (1933-37).
   
  Allí impone su estilo de intelectual inglés. Con su inseparable pipa, con un libro abierto, forma pareja con Bette Davis en "Cautivo del deseo" (Cromwell-34). Al temperamento de la actriz, Leslie imponía su parsimonia. Así hicieron "El bosque petrificado" (Mayo-36), "Es amor lo que busco" o "Siempre Eva" (ambas de 1937), aunque su mayor triunfo lo logra en Inglaterra con "Pimpinela Escarlata" (Young-34). Hay que señalar que salió bien librado de "Romeo y Julieta" (Cukor-36), donde hacía del joven Romeo cuando contaba 43 años.
     A caballo de Inglaterra y U.S.A., dirigió en su país "Pigmalión", que fue un éxito, aunque contó con la ayuda de Anthony Asquith. Y terminó la década con la que sería su película más recordada, "Lo que el viento se llevó", filme que no quería hacer, que detestaba, pero que aceptó a cambio de que Selznick le financiara "Intermezzo" al lado de Ingrid Bergman..
     Establecido definitivamente en Londres durante la 2ª G.M., dirige 3 filmes, y presta su voz a espacios de propaganda en la radio. En 1943, cuando iba a Portugal para dar una conferencia en favor de los aliados, su avión fue abatido en el golfo de Vizcaya. El cine perdía a uno de sus mejores actores.
     Como curiosidad, y como era de religión judía, en sus contratos imponía su derecho a no trabajar en sábado.

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